Crédito: fuente
La búsqueda de una persona trans o drag por unos tacones que representaran su esencia era difícil, pero encontrar un par que entraran en unos pies talla 43 era imposible hasta hace cuatro años cuando Daniel Uyazán, un joven emprendedor de Bogotá, creó Zandan, una marca atrevida que se propuso romper esquemas y llevar un mensaje de inclusión a través de la moda.
Daniel, diseñador industrial y tecnólogo en diseño de calzado y marroquinería, se dio cuenta que no a todas las princesas les calzaba la zapatilla de cristal y así encontró una oportunidad de negocio ante la necesidad desatendida de un nicho que apetecía estilo, irreverencia y originalidad con productos que se adaptaran a la antropometría y ergonomía de la comunidad.
«Con la marca quería contar historias sin prejuicios donde no importara la identidad sexoafectiva y así la persona fuera mujer, hombre o como se defina, eso no iba a ser impedimento para utilizar nuestro calzado», dijo el fundador de esta empresa colombiana en entrevista para Red+ Noticias.
Si bien Zandan se fijó en un principio en la demanda de las drags y trans, su portafolio de productos se diversificó: también diseñan para lesbianas que buscan modelos masculinizados o para hombres que quieren un toque femenino y ahora, con la intención de democratizar la moda en su máxima expresión, manejan un concepto diverso en el que cualquiera puede vestir sus diseños.
El fuerte de Zandan siempre fueron los tacones altos con lentejuelas reversibles, un par de zapatos, según Uyazán, preferido entre las chicas drag por su versatilidad y porque llaman mucho la atención, no obstante, debido al confinamiento por el nuevo coronavirus, la predilección de sus clientes viró hacía la tendencia ‘pleassure’, un calzado casual pero con cierto lujo pues «al ser cómodos, versátiles y combinables con muchas prendas, se convierten en un nuevo ícono».
El COVID-19 no opacó los esfuerzos Zandan por hacer un llamado a la equidad pues, la primera marca abiertamente diversa que participó en el Bogotá Fashion Week, se da el lujo de decir que aumentó sus ventas en tiempos de pandemia a causa de su interés por incursionar en el comercio electrónico desde meses atrás. «Hemos sido afortunados, no nos vimos afectados en cuanto a ventas», aseguró el director creativo.
A propósito de la convocatoria de diferentes organizaciones para llevar a cabo la marcha virtual de este domingo 28 de junio por el orgullo gay, Daniel Uyazán dijo que Zandan participará activamente en la fecha que celebra y conmemora públicamente la diversidad del colectivo del que pertenece, aunque también precisó que «no podemos volver el orgullo LGTBI como un show mediático, no solamente en junio nos visibilizamos. El activismo, la empatía y la inclusión es de todos los días».
Zandan fue beneficiaria del Fondo Emprender del SENA, es aliada de marcas como Theatron de Película y Oh My Drag! y es una de las 120 empresas afiliadas a la Cámara de Comercio LGBT de Colombia, organización que apoya el desarrollo de emprendimientos de esa comunidad.
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La búsqueda de una persona trans o drag por unos tacones que representaran su esencia era difícil, pero encontrar un par que entraran en unos pies talla 43 era imposible hasta hace cuatro años cuando Daniel Uyazán, un joven emprendedor de Bogotá, creó Zandan, una marca atrevida que se propuso romper esquemas y llevar un mensaje de inclusión a través de la moda.
Daniel, diseñador industrial y tecnólogo en diseño de calzado y marroquinería, se dio cuenta que no a todas las princesas les calzaba la zapatilla de cristal y así encontró una oportunidad de negocio ante la necesidad desatendida de un nicho que apetecía estilo, irreverencia y originalidad con productos que se adaptaran a la antropometría y ergonomía de la comunidad.
«Con la marca quería contar historias sin prejuicios donde no importara la identidad sexoafectiva y así la persona fuera mujer, hombre o como se defina, eso no iba a ser impedimento para utilizar nuestro calzado», dijo el fundador de esta empresa colombiana en entrevista para Red+ Noticias.
Si bien Zandan se fijó en un principio en la demanda de las drags y trans, su portafolio de productos se diversificó: también diseñan para lesbianas que buscan modelos masculinizados o para hombres que quieren un toque femenino y ahora, con la intención de democratizar la moda en su máxima expresión, manejan un concepto diverso en el que cualquiera puede vestir sus diseños.
El fuerte de Zandan siempre fueron los tacones altos con lentejuelas reversibles, un par de zapatos, según Uyazán, preferido entre las chicas drag por su versatilidad y porque llaman mucho la atención, no obstante, debido al confinamiento por el nuevo coronavirus, la predilección de sus clientes viró hacía la tendencia ‘pleassure’, un calzado casual pero con cierto lujo pues «al ser cómodos, versátiles y combinables con muchas prendas, se convierten en un nuevo ícono».
El COVID-19 no opacó los esfuerzos Zandan por hacer un llamado a la equidad pues, la primera marca abiertamente diversa que participó en el Bogotá Fashion Week, se da el lujo de decir que aumentó sus ventas en tiempos de pandemia a causa de su interés por incursionar en el comercio electrónico desde meses atrás. «Hemos sido afortunados, no nos vimos afectados en cuanto a ventas», aseguró el director creativo.
A propósito de la convocatoria de diferentes organizaciones para llevar a cabo la marcha virtual de este domingo 28 de junio por el orgullo gay, Daniel Uyazán dijo que Zandan participará activamente en la fecha que celebra y conmemora públicamente la diversidad del colectivo del que pertenece, aunque también precisó que «no podemos volver el orgullo LGTBI como un show mediático, no solamente en junio nos visibilizamos. El activismo, la empatía y la inclusión es de todos los días».
Zandan fue beneficiaria del Fondo Emprender del SENA, es aliada de marcas como Theatron de Película y Oh My Drag! y es una de las 120 empresas afiliadas a la Cámara de Comercio LGBT de Colombia, organización que apoya el desarrollo de emprendimientos de esa comunidad.