Crédito: fuente
El centro está gestionado por sus 1.000 miembros, basando su modelo en la calidad, sostenibilidad, participación y precios asequibles.
Más de 1.000 personas han lanzado LA OSA, el primer supermercado cooperativo y participativo en Madrid, en el que las personas y el medio ambiente están en el centro. Sin ánimo de lucro y gestionado por sus miembros, el local se centra en otro modo de consumo basado en la calidad, sostenibilidad, participación y precio, ajustados a la realidad de los ciudadanos.
Ubicado en el número 57 de la Avenida de Asturias, en el distrito de Tetuán, este local de 800 metros cuadrados está centrado en construir colectivamente este supermercado, en el que las personas que lo forman quieren convertirlo en referente en el consumo responsable y sostenible con su entorno.
LA OSA es otro modelo de supermercado en el que sólo pueden comprar los cooperativistas que han aportado 100 euros al capital social y que se comprometen a desempeñar voluntariamente durante tres horas cada cuatro semanas tareas. En concreto, la recepción de pedidos, atención en caja, reposición, limpieza, administración, entre otras. Junto a ellos, existen dos coordinadores y fundadores, así como un equipo profesional de cuatro personas, los seis perciben un sueldo y se encargan de la gestión del centro y de las compras. Los beneficios se revierten con el objetivo de hacer más accesibles los productos.
En apariencia es un supermercado tal y como conocemos, con una amplia oferta de alimentos y productos para la higiene personal y la limpieza del hogar. Sin embargo, el modelo de autogestión es distinto, reduciendo costes operativos y permite ofrecer precios más asequibles. Y es que a la hora de elegir los productos se valoran seis criterios: calidad, impacto medioambiental, cercanía, producción ética, precio justo y que responda a la demanda de los socios.
LA OSA está creado por personas de distintos barrios de la ciudad y también de otros puntos de la Comunidad de Madrid. De origen, edad y ocupación o situación laboral diversas, todos y todas están involucrados. Creen en un proyecto colectivo, esperan muy pronto dar la bienvenida a nuevos y nuevas cooperativistas.
LA OSA tiene su origen en la tienda del barrio de Malasaña 2decologico, en la calle Noviciado. Unido a movimientos internacionales, como el Park Slope Food Coop (Brooklyn) y, especialmente, La Louve, en París y cuya experiencia y asesoramiento han sido clave.
Fuente: D/A
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El centro está gestionado por sus 1.000 miembros, basando su modelo en la calidad, sostenibilidad, participación y precios asequibles.
Más de 1.000 personas han lanzado LA OSA, el primer supermercado cooperativo y participativo en Madrid, en el que las personas y el medio ambiente están en el centro. Sin ánimo de lucro y gestionado por sus miembros, el local se centra en otro modo de consumo basado en la calidad, sostenibilidad, participación y precio, ajustados a la realidad de los ciudadanos.
Ubicado en el número 57 de la Avenida de Asturias, en el distrito de Tetuán, este local de 800 metros cuadrados está centrado en construir colectivamente este supermercado, en el que las personas que lo forman quieren convertirlo en referente en el consumo responsable y sostenible con su entorno.
LA OSA es otro modelo de supermercado en el que sólo pueden comprar los cooperativistas que han aportado 100 euros al capital social y que se comprometen a desempeñar voluntariamente durante tres horas cada cuatro semanas tareas. En concreto, la recepción de pedidos, atención en caja, reposición, limpieza, administración, entre otras. Junto a ellos, existen dos coordinadores y fundadores, así como un equipo profesional de cuatro personas, los seis perciben un sueldo y se encargan de la gestión del centro y de las compras. Los beneficios se revierten con el objetivo de hacer más accesibles los productos.
En apariencia es un supermercado tal y como conocemos, con una amplia oferta de alimentos y productos para la higiene personal y la limpieza del hogar. Sin embargo, el modelo de autogestión es distinto, reduciendo costes operativos y permite ofrecer precios más asequibles. Y es que a la hora de elegir los productos se valoran seis criterios: calidad, impacto medioambiental, cercanía, producción ética, precio justo y que responda a la demanda de los socios.
LA OSA está creado por personas de distintos barrios de la ciudad y también de otros puntos de la Comunidad de Madrid. De origen, edad y ocupación o situación laboral diversas, todos y todas están involucrados. Creen en un proyecto colectivo, esperan muy pronto dar la bienvenida a nuevos y nuevas cooperativistas.
LA OSA tiene su origen en la tienda del barrio de Malasaña 2decologico, en la calle Noviciado. Unido a movimientos internacionales, como el Park Slope Food Coop (Brooklyn) y, especialmente, La Louve, en París y cuya experiencia y asesoramiento han sido clave.
Fuente: D/A