El Corte Inglés reestructura sus marcas de mujer y capta firmas de terceros

El Corte Inglés continúa la reestructuración de su negocio de moda femenina. El grupo español de grandes almacenes prepara el cierre de tres de sus marcas propias: Amitié, Síntesis y Tintoretto. La compañía liderada por Marta Álvarez está llevando a cabo una reorganización de sus espacios dedicados a moda para mujer reduciendo la presencia de marcas propias e incorporando nuevas firmas de terceros.

Según han confirmado a Modaes.es fuentes cercanas a la compañía, El Corte Inglés se encuentra actualmente en negociaciones con un gran número de firmas de moda femenina para su incorporación mediante corners de gestión propia a sus centros de toda España. El objetivo de la empresa es completar la reestructuración en la próxima temporada otoño-invierno 2021, tras “haber dado por perdida la temporada primavera-verano”.

En la campaña primavera-verano actual Amitié y Síntesis ya no forman parte de la oferta de El Corte Inglés, según han confirmado fuentes de la empresa. Los planes del grupo pasan por prescindir también de Tintoretto, si bien estas mismas fuentes no han confirmado esta información. El Corte Inglés pretende centrarse en sólo siete marcas propias y en lo próximos meses, el grupo de grandes almacenes tiene previsto prescindir de dos marcas propias más.

El Corte Inglés lleva ya años reduciendo su negocio de marcas propias en favor de las de terceros. En 2013, el grupo contaba con catorce marcas propias en la categoría de moda femenina. En 2017, el grupo echó el cierre a Essentials y Studio Classics y en 2019, ya bajo la presidencia de Marta Álvarez, anunció la integración de Antea, Zendra y Yera bajo la marca Woman.

El Corte Inglés prepara el cierre de más marcas propias para centrarse en sólo seis

La creación de la marca Woman tenía como objetivo, según explicó entonces la empresa, potenciar su negocio de moda femenina, con movimientos como el fichaje de Elena Lazcanotegui, procedente del grupo alemán Esprit, como responsable de moda femenina y lencería.

Las previsiones de la empresa pasaban por reforzar su negocio propio de moda femenina con dos nuevos lanzamientos en 2020, con las marcas Alik y Another Love, tal y como anunció la propia presidenta de El Corte Inglés. Estas nuevas firmas no han llegado a ver la luz, tras un ejercicio marcado por el impacto de la crisis del Covid-19.

Ahora, la compañía prescindirá de Tintoretto, Amitié y Síntesis, de manera que en su cartera de marcas de moda femenina permanecerán, de momento, Easy Wear, Southern Cotton, Green Coast, Énfasis, Gloria Ortiz, Elogy o Jo&Mr Joe.

Elena Lazcanotegui dirige las marcas propias del grupo y Javier Merino, el negocio de marcas externas

Mientras reduce su cartera de marcas propias, el grupo de grandes almacenes está apostando por captar nuevas firmas externas de moda femenina. Bajo la dirección de Javier Merino (responsable de moda mujer marcas externas), la compañía mantiene negociaciones con compañías españolas e internacionales para incorporar a sus centros.

A la reorganización de marcas propias se suma el golpe de la crisis del Covid-19, que ha impactado en un gran número de marcas de tamaño medio y ha provocado la salida de España de firmas internacionales, lo que ha dejado espacio libre en las plantas de El Corte Inglés.

La moda es uno de los mayores negocios de El Corte Inglés, no sólo por el volumen de negocio que le reporta, sino también por la imagen que le proporciona. Según los últimos datos disponibles, El Corte Inglés registró unas ventas de cerca de 5.000 millones de euros en productos de moda en 2019, lo que supuso un incremento del 2,3% respecto al ejercicio anterior.

Entre las ventas realizadas en sus grandes almacenes (tanto de marcas propias como de terceros) y las de su cadena de moda Sfera, El Corte Inglés facturó en 2019 un total de 4.967 millones de euros, incluyendo también las ventas en los centros de El Corte Inglés en Portugal y las de Sfera en el extranjero. El margen bruto de la categoría de moda se situó en 2019 en el 36,9%, con un retroceso de medio punto respecto al año anterior.

Duramente afectado por las restricciones al comercio derivadas del Covid-19 por el tamaño de sus establecimientos, el grupo de grandes almacenes está llevando a cabo una reorganización de su red de centros, cerrando algunos y cambiando su uso, convirtiéndolos, por ejemplo, en centros de distribución.

Además, la empresa acaba de completar un plan de ajuste de plantilla con salidas voluntarias, tras pactar con los sindicatos el despido de 3.292 personas. En paralelo, la compañía está negociando un nuevo acuerdo de refinanciación de una deuda de 3.500 millones de euros con la banca.