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Bath&Body Works se contrae en su primer trimestre en solitario. La compañía, escindida de Victoria’s Secret el pasado agosto, ha reducido sus ventas un 1,25% en el tercer trimestre, terminado el pasado 30 de octubre, hasta 1.680 millones de dólares, según anunció la compañía en un comunicado.
El grupo estadounidense, especializado en cosmética, ha generado un resultado neto de 87 millones de dólares, frente al beneficio de 330 millones de dólares que registró en el tercer trimestre de 2020.
La compañía ha apuntado que la caída se debe al pago de deudas en el último año, y señala que sus ingresos por acción se han incrementado hasta 0,92 dólares respecto al tercer trimestre de 2020. Respecto al mismo periodo de 2019, Bath&Body Works ha superado sus ventas en un 52,9%.
En los nueve primeros meses del año, Bath&Body Works ha incrementado su facturación en un 30% respecto al mismo periodo de 2020, hasta 4.854 millones de dólares, y ha dejado atrás las pérdidas de los tres primeros trimestres del año pasado, generando beneficio de 783 millones de dólares.
Bath&Body Works ha superado sus ventas prepandemia en un 53% en el tercer trimestre
Hasta octubre, el grupo ha llevado a cabo una renovación de su red de retail, cerrando once puntos de venta en Norteamérica y abriendo cincuenta. En el mercado internacional, la compañía cerró siete tiendas y abrió 31, quedando en 288 establecimientos a 30 de octubre de 2021.
L Brands se escindió el pasado agosto en dos sociedades independientes: Bath&Body Works (donde se incluye la cadena de cosmética y perfumería) y Victoria’s Secret & Co, que opera con la firma del mismo nombre, además de con las firmas Victoria’s Secret Lingerie, Pink y Victoria’s Secret Beauty. La operación se llevó a cabo al no encontrar un comprador para Victoria’s Secret, un proceso que llevaba en marcha desde antes de la pandemia.