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Instituciones financieras han afectado a personas en su economía ya que por la pandemia los bancos hacen ineficientes los procesos para programa
Juan Hernández
Las instituciones financieras , ante la Contingencia Sanitaria por la COVID-19 por la que atraviesa México, han ocasionado que cientos de sus usuarios estén en la zozobra debido ya que han sido afectados por el repentino cierre de negocios, la pérdida de empleo y junto con ello, la falta de claridad de su restructura de deuda con los bancos.
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Luego de vencerse la fecha en la que los bancos apoyarían a sus clientes para incorporarlos a sus programas de diferimiento de pagos en sus créditos a empresas y personas que estén siendo afectadas por la pandemia del COVID-19,usuarios de la Banca denunciaron tortuguismo y trabas para solicitar este beneficio.
Ejemplo de ello fue la señora Isela, quien señaló que solicitó una prórroga de pagos a Banorte, debido a que la empresa en la que laboraba cerró y aunado a este problema, está en cuarentena por ser sospechosa de COVID-19.
“Además de haber perdido mi empleo, tengo que estar en Cuarentena y no puedo enviar a nadie para que me apoye porque mi papá es una Adulto Mayor de 70 años y mi hija es menor de edad”, señaló.
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Denunció que por todos los medios intentó buscar el beneficio de la prórroga de pagos, sin embargo, los ejecutivos no daban soluciones y además, pese a conocer la situación por la que atravesaba, le exigían que fuera su padre o su hija a arreglar lo de sus pagos.
“¿Es en serio los que me exigían los ejecutivos? Les explique una y otra vez que no podía poner en riesgo a mi padre y a mi hija porque estábamos en Cuarentena, pero eso poco les importó , hasta parecía una burla hacia mí”, destacó.
A pesar de haber llenado en línea la solicitud, el sistema simplemente me la rechazó, indicó la señora Isela quien al haber perdido el empleo, ahora pasó de ser un cliente ejemplar a ser “moroso” por el COVID-19 y ahora teme ser abrumada con los altos intereses del banco.
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Otro Caso fue el de Arturo, quien está con un banco de una tienda departamental, que además de exigirles los pagos, ahora se los solicita que lo hagan hasta con dos semanas de anticipación, sin contar que en caso de atraso, son presas de los call center que a toda hora les llamas tanto a sus familiares como a ellos para exigirles que “se pongan al corriente”.
AUMENTO DE QUEJAS
De acuerdo a la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef), en el periodo enero-septiembre de 2019, los usuarios de las instituciones financieras realizaron 5.8 millones de quejas dirigidas a 25 sectores del sector financiero conformados por 2 mil 992 empresas.
Los bancos fueron el segmento con el mayor número de reclamaciones, ya que recibieron 92.2 quejas por cada 10 mil contratos.
Asimismo, los bancos que recibieron más quejas fueron Banorte, con 2 mil 682 reclamaciones por cada 10 mil contratos, luego de Santander, con mil 196, y Banregio, con mil 181.
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Ante ello, la Condusef hizo un llamado a los usuarios a no perder la calma e insistir hasta obtener respuesta, así como no adelantar juicios, ya que la Crisis Sanitaria del COVID-19 se trata de una situación extraordinaria.
Asimismo, la entidad de defensa financiera señaló que si el usuario puede demostrar que existieron circunstancias para la falta de pago, como el desempleo y la misma contingencia del Coronavirus, se le orientará al respecto.
«Lo más importante es que el usuario conserve la calma y que no vaya a tomar una acción que no sea prudente. Si te encuentras en esta situación, la Condusef recomienda conservar la calma, insistir lo más que se pueda y dejar algo como antecedente: número de folio, un correo electrónico o una llamada”, recomendó.