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Primer trimestre a la baja para Kontoor Brands. La matriz de Wrangler y Lee, nacida el año pasado tras la escisión de VF de las marcas de denim, finaliza los tres primeros meses de 2020 impactada por la crisis del coronavirus. La empresa ha registrado una caída del 22% en sus ventas, al tiempo que ha entrado en pérdidas en el periodo.
“La pandemia del Covid-19 ha tenido un impacto sin precedentes en el mundo, incluyendo las operaciones y los resultados de Kontoor”, ha señalado Scott Baxter, presidente y consejero delegado del grupo. “A lo largo de febrero, nuestros resultados estaban en línea con las previsiones, pero a medida que el trimestre avanzó los impactos del Covid-19 se hicieron más pronunciados”, ha explicado.
Kontoor finalizó el primer trimestre con unas ventas de 504,49 millones de dólares, desde los 648,34 millones de dólares del mismo periodo del año anterior. Tanto Lee como Wrangler registraron descensos a doble dígito: mientras la primera redujo sus ventas un 24%, hasta 182,76 millones de dólares, la segunda lo hizo un 18%, hasta 303,39 millones de dólares.
Tanto Lee como Wrangler registraron descensos a doble dígito, con un 24% y un 14%, respectivamente
La compañía atribuye la caída de las ventas en el primer trimestre al cierre de tiendas dictado en prácticamente en todo el mundo para contener el avance del coronavirus. En Estados Unidos, las ventas del grupo registraron una caída del 16% (hasta 379 millones de dólares), mitigada en parte por el crecimiento del canal digital. Kontoor señala que sus ventas digitales wholesale se elevaron un 41% en el periodo.
El negocio internacional del grupo, por su parte, retrocedió un 37% y se situó en 126 millones de dólares, con China como el mercado más afectado durante el periodo.
El margen bruto del grupo estadounidense retrocedió en el primer trimestre treinta puntos básicos, hasta el 37,8% de las ventas. La compañía atribuye el descenso a las provisiones de inventario, a la caída de las ventas y al ajuste de las producciones.
La empresa entró en pérdidas en el primer trimestre, con unos números rojos de 2,71 millones de dólares, frente a los 15,41 millones de dólares del mismo periodo de 2019. Las pérdidas operativas del grupo ascendieron a 164 millones de dólares, en comparación con los 25 millones positivos de un año antes.
En este sentido, el grupo ha puesto en marcha una serie de medidas para hacer frente al corto plazo, entre las que figura la gestión de la financiación y la suspensión temporal del dividendo, que reforzarán la liquidez del grupo.