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Foot Locker entra en números rojos. El distribuidor de artículos deportivos cerró los tres primeros meses del año con unas pérdidas de 98 millones de dólares, que contrastan con los 172 millones de dólares de beneficio que obtuvo en el mismo período del año anterior.
Además, su facturación se desplomó un 43% en el primer trimestre, hasta 1.176 millones de dólares. “Nuestro equipo se ha centrado en controlar sólo aquello que podíamos para proteger nuestro negocio”, ha asegurado Richard Johnson, consejero delegado y presidente de Foot Locker. “Hoy estamos en las primeras fases de la recuperación gracias a nuestros esfuerzos”, ha añadido.
Antes de que llegase la pandemia, Foot Locker abrió cinco nuevas tiendas y relocalizó otras nueve. Asimismo, 21 establecimientos bajaron la persiana. La compañía cuenta con 3.113 puntos de venta en 27 países, a los que se suman otros 54 franquiciados en países de Oriente Próximo.