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LVMH sube su apuesta por Tod’s. El grupo francés de lujo ha elevado su participación en la compañía italiana hasta el 10%, según ha confirmado la empresa en un comunicado. El conglomerado que ya poseía el 3,2% del capital de Tod’s, ha adquirido 2,25 millones de acciones más por valor de 74,5 millones de euros.
La transacción se ejecutará el próximo 28 de abril. LVMH ha comprado las nuevas acciones a Diego Della Valle, presidente y consejero delegado de Tod’s, que pasará a poseer el 63,64% de las acciones de la compañía.
“La amistad con Diego Della Valle y su familia se remonta a más de 20 años, una relación cimentada en valores humanos y profesionales comunes; estamos muy contentos de reforzar aún más esta unión”, ha señalado Bernard Arnault, presidente y consejero delegado de LVMH.
“Compartimos los valores del lujo, la calidad y el atractivo de los productos”, ha apuntado por su parte Della Valle, añadiendo además que este movimiento puede “representar una excelente razón para considerar oportunidades a tener en cuenta en el futuro”.
LVMH ha comprado más acciones de Diego Della Valle
La operación se produce después de que, a principios de este mismo mes, Tod’s incorporara a la influencer italiana Chiara Ferragni a su consejo de administración. Tras el fichaje, la compañía de lujo disparó su valor en bolsa un 14%.
El made in Italy ha protagonizado en los últimos meses una serie de movimientos de fusiones y adquisiciones, muchas de ellas motivadas por el estallido de la pandemia, que ha mermado el negocio de muchas compañías del sector de la moda. En marzo de este año, por ejemplo, OTB selló la compra de Jil Sander por un importe que no trascendió. Moncler también completó la compra de Stone Island a finales del mismo mes, y, pese a que todavía no se ha formalizado nada, Etro admitió esta misma semana que consideraba aliarse con algún operador, después de que L Catterton se interesara por la marca.
Tod’s cerró el ejercicio 2020, finalizado el 31 de diciembre, con una disminución de sus ventas del 37%. La compañía italiana cerró el año con 300 tiendas propias en todo el mundo y 103 franquicias, frente a los 290 establecimientos propios y las 115 franquicias del año anterior.
