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El experto enumera las formas en que Internet y las herramientas digitales son utilizadas en el mundo para combatir al COVID-19
En la crisis que envuelve al mundo en estos momentos, debida al avance del COVID-19, la intervención de la tecnología juega un papel primordial para la vida humana. No solamente con el fin de identificar de qué manera avanza la infección sino para prevenirla. También facilita procesos de todo tipo para agilizar y mejorar la atención en los sistemas de salud de los distintos países.
Por medio de Big Data, se pueden obtener muchos datos epidemiológicos y científicos, lo cual permite identificar patrones y tomar decisiones para evitar la diseminación del virus. Hoy, gracias a dashboards globales como la desarrollada por nuestros especialistas de Nubiral, contamos con información de esta evolución en todo el mundo, que se va renovando minuto a minuto y que ayuda a médicos, científicos, investigadores y líderes políticos a generar predicciones y poder tomar medidas.
Las herramientas de geolocalización de celulares y otros dispositivos, generan un gran volumen de datos que se pueden ver en Google y permiten reconocer, por ejemplo, dónde hay población infectada y qué movimientos estamos haciendo. Cada país las utiliza según sus normativas y posibilidades.
Por ejemplo, en Corea del Sur desde los inicios de la pandemia se toma registro de la circulación de las personas infectadas mediante datos de smartphones y sitios web, entre otras fuentes de información. Si alguien se entera de que podría haber estado expuesto al virus y tiene síntomas posiblemente asociados al mismo, puede visitar rápidamente a un médico y comenzar la cuarentena.
En China existe una aplicación en la que cada ciudadano debe identificarse, informar su temperatura y reportar sus acciones diarias. Gracias a ella, se determina poner en cuarentena a quienes pudieron haber tenido contacto con portadores de la enfermedad.
Además, la app mediante un código QR registra el recorrido de las personas de un lugar a otro y se les asigna a un color según tengan permitido entrar en espacios públicos o quedarse en cuarentena en su hogar. En Taiwán también a través de un escaneo de QR se facilita el trabajo en las aduanas con el fin de que puedan identificar qué personas son sospechosas de haber contraído la enfermedad.
Por otra parte, la tecnología tiene un rol fundamental en muchas cuestiones como hacer más veloces procesos tales como la investigación y el desarrollo de tratamientos y vacunas –usando técnicas conocidas como NLP, siglas en inglés de Procesamiento de Lenguaje Natural–, «leer» grandes volúmenes de texto, identificar palabras clave y asociarlas entre sí, reduciendo los ciclos de desarrollo de medicamentos; automatizar gestiones administrativas para agilizarlas; enviar drones con suministros y hacer que sea más sencillo diagnosticar; entre otras.
Respecto de los diagnósticos, por ejemplo, en Corea del Sur se hacen pruebas masivas con el uso de la tecnología y sin riesgo de contacto con quienes las realizan. La persona se registra, va a un drive in en un lugar apartado y en cinco minutos le realizan un raspado nasal. A las 24 horas, la persona recibe los resultados del test y, si es positivo, debe hacer una cuarentena obligatoria de 15 días.
La tecnología, que ahora se pone aún más en valor en el contexto de expansión de la pandemia, es algo en lo que venimos trabajando. Cada vez más se digitalizan los procesos. Así sucede por ejemplo con las empresas donde se vuelca todo a la nube, previendo que, si hay algún incidente como un incendio o lo que fuera, su equipo pueda seguir trabajando.
También se observa este avance en la sociedad: en estas circunstancias la tecnología nos ayuda a sentirnos menos aislados, aunque los más jóvenes ya interactúan continuamente a través de una pantalla con otras personas. Además, la gente cuenta con la ventaja de que ya no tiene que salir de su casa para hacer las compras básicas porque tiene la posibilidad de hacerlo desde su celular, por ejemplo.
En nuestro país se puede avanzar mucho más en la implementación de las IT para acelerar el proceso de contención. Ya estuvimos viendo las experiencias de otros países y contamos con profesionales de gran expertise en analytics, big data y cloud technology, para intervenir en este contexto y agilizar aún mucho más la tarea de prevención que se viene llevando a cabo.
*Sergio Mastrogiovanni es Head of Data and Innovation de Nubiral