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El gigante de lujo suizo Richemont, propietario de la casa de joyas Cartier y Montblanc, anunció el viernes la salida «con efecto inmediato» de Sophie Guieysse, su directora de Recursos Humanos, en medio de la controversia por la política de remuneración de los ejecutivos.
Según Le Temps, el grupo con sede en Ginebra anunció el 27 de mayo un aumento del 35,8 % en la remuneración de su comité de dirección. La remuneración acumulada alcanzó los 41,4 millones de francos suizos (38,7 millones de euros) en el ejercicio económico que finalizó a finales de marzo. Al mismo tiempo, la empresa anunció una reducción del 25 % de las primas anuales de sus empleados, pero también la no compensación de la jornada reducida para los meses de junio y julio. Esta decisión ya había ocasionado la huelga, el 5 de junio, de los equipos de la división italiana de Richemont en Milán y Turín, informó el diario suizo.
En este contexto, la partida de la directora de Recursos Humanos parece ser peor en un intento de calmar las tensiones. Así, Sophie Guieysse no se volverá a presentar al consejo de administración, del que es miembro desde 2018, en la próxima reunión general que se celebrará en septiembre, según indicó el grupo en un breve comunicado de prensa.
Graduada por la Escuela Politécnica y la École National des Ponts et Chaussés, Guieysse comenzó su carrera en varios ministerios antes de unirse al grupo francés LVMH, el número uno mundial del lujo, en 1997, después en 2005 se integró al grupo Canal +. En octubre de 2017, se hizo cargo de la gestión de recursos humanos de Richemont.
El número dos del mundo en artículos de lujo registró un beneficio de explotación de 931 millones de euros en su último ejercicio, con un descenso del 67 %. La cifra de negocios, por otra parte, aumentó un 2 % hasta 14 238 millones de euros.
Con AFP
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