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S&P mantiene el rating de Decathlon. Pese a la caída de las ventas por el coronavirus, la agencia califica la deuda de la compañía francesa de distribución de moda deportiva con un nivel A2, y espera que vuelva a registrar un “sólido” crecimiento en 2022.
La agencia estima que las ventas y el resultado de la compañía “disminuyan drásticamente” en el ejercicio 2020. “Las ventas de Decathlon podrían caer entre un 20% y un 25% en 2020 en comparación con 2019”, ha señalado S&P. La agencia estima que el ebitda ajustado de la empresa se contraiga entre 750 millones de euros y 850 millones de euros.
“Esperamos que el efecto a largo plazo sobre la solvencia crediticia de Decathlon sea algo limitado, gracias a la gestión activa de costos del grupo y la prudente política financiera”, añade S&P. “Esperamos que el efecto a largo plazo sobre la solvencia crediticia de Decathlon sea algo limitado, gracias a la gestión activa de costos del grupo y la prudente política financiera”, continúa la agencia.
S&P señala que entiende que Decathlon tenga la capacidad de moderar significativamente sus compras para la próxima temporada, lo que se traducirá en menos deuda a corto plazo. La agencia prevé que la empresa reduzca su capex hasta 400 millones de euros.