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“En 1984 la vida me regaló la oportunidad de crear Desigual”. De esta manera comienza Thomas Meyer una carta dirigida a sus empleados en la que reflexiona sobre la situación que ha provocado la pandemia del coronavirus. El fundador de la compañía señala en la misiva que esta situación “nos enseñará algo” y “traerá nuevas oportunidades”.
“Hemos tocado fondo varias veces, y cada vez hemos logrado recuperarnos”, reconoce Meyer en la carta. “Y cada vez que hemos aprendido algo significativo y hermoso, lo que de verdad importa y lo que no”, añade el empresario en la carta.
“Hemos aprendido a ser más humanos, porque hemos perdido mucho, pero de manera proporcional hemos ganado en foco y valores”, confiesa Meyer. “Hemos aprendido una lección de humildad y que las cosas deben cambiar”, añade. “Estamos unidos, somos más fuertes y estamos más seguros acerca de cómo debería ser nuestro futuro”, concluye la carta.
Desigual fue de las primeras compañías en España en reaccionar ante el avance del coronavirus, cerrando sus tiendas en todo el país el pasado 13 de marzo, un día antes de la orden decretada por el Gobierno.
Poco después, la empresa puso en marcha un expediente temporal de regulación de empleo (Erte) sobre el personal, que afectó a 746 trabajadores de tienda y 600 de oficinas. A partir del lunes, Desigual recuperará a la plantilla de oficina, que comenzará a reincorporarse gradualmente.
Thomas Meyer salió por primera vez a la prensa el pasado febrero para hacer un recorrido sobre la situación actual de la empresa. “En Desigual están pasando cosas bonitas y quiero contarlas”, se justificó tras años sin acceder a entrevistas ni comparecencias.