Crédito: fuente
Nuestra imagen comunica quiénes somos y refleja características de nuestra personalidad. Lo mismo sucede con las empresas; un equipo designado construye su imagen a través de colores, formas, símbolos y una actitud, a los cuales el consumidor otorga una identidad y crea una percepción de esta. La importancia de esta imagen radica en la decisión de la confianza que la persona le concede, ya sea a un individuo o a la marca.
Confié, entonces, en que el D iploma de RR.PP, Visual Merchandising y Estilismo me ayudaría a complementar las herramientas que ya tengo para así continuar mi formación y alcanzar el profesionalismo, siendo esa la esencia del diplomado; “ayudar a construir el perfil ideal de la imagen”.
En Relaciones Públicas, la imagen es “lo que los públicos creen que la empresa es, se trata la percepción acerca de la organización”, y esta puede ser una herramienta de gran utilidad pues puede influir en la reacción del mensaje que estemos emitiendo.
En esta era de tantas opiniones, ideologías y movimientos es más que apropiado que nos sumemos a compartir quiénes somos y por qué lo somos, qué pensamos, en qué estamos de acuerdo, en qué no y, de igual forma, el por qué. Aquí la importancia de pensar no únicamente en qué decimos, sino también el cómo lo decimos; comenzar a cuestionarnos la imagen que los demás tienen de nosotros y apoyarnos en esto para que el mensaje sea recibido de la forma en que se espera. Así mismo, es importante comprender que para que haya existido esta apertura a nuevas ideas, tuvo que existir tolerancia entre las ideas que no se parecían, justamente las Relaciones Públicas “persiguen un diálogo constante, no imponen ni exigen”.