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La necesidad de trabajar hace que varias personas no se queden en casa, como lo ha pedido el Gobierno federal para evitar la propagación del Covid-19.
Ya sea adscritos a alguna empresa que se encarga de emplearlos y darle una paga o vendedores por cuenta propia, mexicanos recorren calles de la Ciudad de México para cumplir con lo que les corresponde.
Felipe Hernández viaja desde el Estado de México hasta la Ciudad de México, en un trayecto que le llega a tomar hasta 2 horas, para llegar a trabajar en el área de jardinería de una tienda departamental que decidió no cerrar y sólo redujo su horario de apertura y cierre.
Este hombre no tiene la opción de decidir si se queda en casa, para protegerse de la propagación de la enfermedad de coronavirus.
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“Pues estoy trabajando. Trabajo de lunes a sábado de ocho a una. Nos han dicho que tengamos limpia la jardinera, que mojemos, que mojemos la tierra”, comentó.
El hombre está encargado de mantener frescas las jardineras que rodean todo el predio que ocupa esta tienda departamental en la colonia Roma Norte.
Al llegar al trabajo, relató, simplemente les toman la temperatura y les dan un poco de gel antibacterial.
Por la misma zona ronda Luis, un vendedor de fruta y verdura picada. En un carro de madera que ocupa como puesto, recorre esquinas para colocarse y ofrecer el producto.
Pero al menos en lo que va de este sábado, no ha logrado vender nada. En el carro carga unos mangos a los que los días se le empiezan a notar.
Originario de Veracruz, refirió que quisiera quedarse en casa pero no le es posible, pues vender su producto representa llevar dinero a casa.
“Quisiéramos quedarnos en casa, pero la necesidad nos obliga a salir”, declaró.
Sin embargo, detalló que así como van las cosas ante la contingencia por coronavirus, tendrá que quedarse en su casa también.
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