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Viendo el panorama desde una perspectiva optimista, la población peruana aún sin bancarizar es una oportunidad de crecimiento importante para las fintech.
El 2011 es el primer año en el que se observa un primer crecimiento relevante del sector fintech en América Latina.
Hoy en día, los principales mercados de servicios fintech son China, India, Alemania y España. Mientras que en Latinoamérica son Brasil y México.
De acuerdo con un informe, del 2018 al 2019, en Brasil, creció el número de usuarios tanto para apps de banca y fintech.
Precisamente, un informe del sector mostró que Nubank es la fintech favorita de los brasileños. Este “neobanco” que todavía no cotiza en bolsa está valorado en 10.000 millones de dólares.
El mercado de pagos digitales en América Latina viene creciendo más del 20% en los últimos años, logrando una fuerte expansión impulsada por el desarrollo de las fintech.
Parte de esta disrupción se produce porque los organismos reguladores presionan para que se reduzcan los costos de intercambio.
Aunque quizás el cambio más significativo refleje el impacto de una presencia fintech en rápida expansión que está acelerando la innovación tecnológica y aumentando el poder de los comercios.
En tanto, en el Perú los grandes clientes de las fintech son las pymes, los consumidores insatisfechos con la banca tradicional y las personas excluidas del sistema financiero.
“Perú es un país que continúa su evolución hacia los pagos digitales al aparecer múltiples jugadores: fintech locales como Yape, Tunki, Lukita y la masificación de QR en comercios físicos”, señaló Joaquín Valle, managing director y partner de BCG en Perú.
También comentó que su estrategia está siendo la adecuada, enfocándose a rubros claves en el contexto de la transformación de la industria.
EL FUTURO DE LOS BANCOS
Algunos bancos han lanzado ramas de corporate venture para invertir en ‘fintech’ que satisfagan sus necesidades. Mientras que otras empresas han creado sus propias spin-offs.
Otro enfoque común es comprar una fintech o un producto específico de ellas en lugar de crear una solución de cero.
Pero también hay bancos que optan por contratar startups para ayudarlos a desarrollar sus productos digitales.
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