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Falabella pone punto y final a su andadura en el mercado argentino. La compañía chilena, la mayor de tiendas departamentales de Latinoamérica, ha echado el cierre a los últimos tres establecimientos con los que operaba en el país.
En concreto, la empresa ha clausurado un establecimiento en Rosario y dos en Buenos Aires, ubicados en el centro comercial Unicenter y la calle Florida. La decisión se enmarca “en el contexto del plan que Falabella está llevando a cabo para hacer sustentable su operación en Argentina”, según ha explicado en un comunicado que recoge Clarín.
Igual que en los anteriores cierres, el plan contempla un retiro voluntario para todos los trabajadores de las tiendas, que bajarán la persiana en un plazo de sesenta días. En total, los tres puntos de venta daban empleo a 500 personas. Falabella continuará operando únicamente a través de su plataforma de ecommerce.
Falabella mantendrá por ahora su canal online operativo en el país
A finales del año pasado, Falabella anunció su intención de vender todas sus tiendas en el mercado argentino, los establecimientos de Sodimac y también su negocio de CMR, su tarjeta de fidelización.
Los centros de Falabella no despertaron el interés de ningún operador, las ofertas por Sodimac no convencieron a la compañía y las negociaciones por CMR, que estuvo a punto de pasar a manos del banco Supervielle, tampoco llegaron a puerto por un desacuerdo en el precio, precisa Clarín.
Falabella aterrizó en Argentina a principios de la década de los noventa y llegó a tener diez puntos de venta bajo su marca insignia y otros siete de Sodimac, especializada en mobiliario y otros artículos de mejoramiento del hogar.
El grupo cerró el ejercicio 2020 (finalizado el 31 de diciembre) con un tímido repunte de los ingresos del 0,6%, hasta 9.469 millones de dólares. La compañía esquivó el golpe del Covid-19 gracias a la buena evolución de las ventas en el cuarto trimestre.
