Un autoproclamado inversor de Twitter se burló de Elon Musk al ofrecerse a adquirir la red social por 30 mil millones de dólares menos de los que le costó a su nuevo propietario.
Leonidas Raisini propuso pagar 14.260 millones de dólares por la compañía y, para hacer una oferta formal, utilizó casi las mismas palabras que usó Musk en la carta enviada en abril al entonces presidente de Twitter, Bret Taylor, con su propuesta final de 44.000 millones de dólares.
En su misiva, Raisini explica, usando exactamente las palabras de Musk, que antes de su compra por parte del magnate, había invertido en la red social “porque creía en su potencial de ser la plataforma para la libertad de expresión en todo el mundo”. “Y creo que la libertad de expresión es un imperativo social para una democracia que funcione”, añade.
Al igual que en su momento hizo el multimillonario con la antigua junta directiva de Twitter, Raisini acusa al nuevo dueño de incumplir con ese “imperativo”, asegurando que la plataforma se ha convertido en “un caldo de cultivo para el odio y el terrorismo en línea”.
En su carta a Taylor, Musk había defendido que Twitter debía ser una empresa privada. Sin embargo, Raisini declara que la red social tiene que “transformarse en una empresa pública en la que los miembros se conviertan en sus propietarios”. “Juntos, estos miembros forman el órgano rector de Twitter y bajo un liderazgo que puede respetar la libertad de expresión sin difundir desinformación ni odio”, asevera.
“Es mi mejor y última oferta y, si no se acepta, tendría que reconsiderar mi posición como accionista”, repite el inversor la carta de Musk, añadiendo —tras modificar levemente las palabras del magnate— que “Twitter tiene un potencial superextraordinario”. “Soy el indicado para desbloquearlo”, concluye.
El más duro crítico de Elon Musk
El portal Insider, fuente de la historia, no ha podido confirmar si es que realmente se trata de un inversionista de la red social. Pero lo cierto es que Raisini es un crítico ferviente de Elon Musk. Por ejemplo, en noviembre, tildó al multimillonario de “mentiroso patológico, charlatán y un super villano”.
La carta de Raisini a Musk presenta el membrete de Raisini Ltd, una empresa con sede en Londres. Sin embargo, Companies House, el registro de empresas del gobierno británico, enumera el negocio como inactivo.