Desde hace cinco años, el mercado de las bodegas en Colombia ha llegado atravesando por un proceso de ajuste de en la oferta y en la demanda. Así lo identificamos las cifras del mercado inmobiliario corporativo de la firma de servicios Colliers International. Roberto Cáceres, gerente general en Colombia de la empresa, aseguró que hasta el 2016 presentó un período de expansión en dicho rubro provocando un crecimiento en el tamaño de los mercados. A pesar de que la tasa de vacaciones en bodegas en el país (cercano al 13%) se ha reducido como consecuencia de la entrada del sector logístico y minorista, aún persiste Una situación de sobreoferta reflejada en cuatro puntos porcentuales sobre lo que se considera un mercado sano. En Colombia hay más de 6 '500. 000 m2 de inventario, una oferta de casi 900. 000 m2 y 5 '594. 800 m2 en construcción y proyectados. De estas cifras, las bodegas con mayores especificaciones, la mayor absorción, la reducción de la tasa de disponibilidad en un 77% comparado con las cifras del 2018. En cuanto a los precios de renta, Barranquilla presenta los costos más altos de Colombia con un valor de $ 15. 300 por metro cuadrado al mes. De igual forma, allí también está el arriendo más caro del país ($ 19. 000). Específicamente, en el sector de Barranquillita. Por su parte, Bogotá tiene precios alrededor de los $ 15. 200 teniendo en cuenta corredores como Tocancipá, Funza, Mosquera, calle 80, occidente y Gachancipá. Entretanto, Medellín es la ciudad donde los precios de venta son más reducidos en comparación con los centros industriales de otras urbes. En la capital antioqueña el precio por m2 puede superar los $ 3 '000. 000 . Sin embargo, el aumento de la oferta se debe principalmente a una disminución generalizada de la demanda y el crecimiento del inventario. Por esta razón, los constructores han empezado a adoptar un modelo de venta que se base en la demanda y no en la oferta; es decir, construyen el inmueble acorde a las necesidades del cliente. Este modelo ha surgido como respuesta al estímulo del mercado que ha presentado una falla al momento de absorber los metros peligrosos en los últimos meses. Sin embargo, en los últimos dos años se evidencia una clara disminución en la oferta de bodegas a nivel nacional debido a la contracción comienza a ser contrarrestada con precios favorables para los arrendatarios. Por lo tanto, es posible decir que la recuperación del sector se hace posible haciendo que los ocupantes de un predio en la apertura encuentren precios más favorables en instalaciones de mayor calidad. Dado este panorama, “la inyección de metros cuadrados no es tan acelerada como sí sucede en otros segmentos del mercado”, mencionó Cáceres. Es decir, hay menor nivel de riesgo, lo que permite un aumento en la confianza y una mejora en la curva de demanda. “Si un parque industrial es de 100. 000 metros, no puedo hacer solo una parte que algún arrendatario puede demandar la zona completa, por eso es mejor hacer 2 o 3 bodegas modulares cada una que sumen en total 10. 000 m2 ”, explicó. Cabe resaltar que Cali es la ciudad donde las condiciones arquitectónicas suelen ser más básicas, además, es una de las urbes con menor inventario (500. 000 m2). Esta cifra equivale al 8% del total en el país. Cáceres adicionó que algunos generadores de demanda han sido almacenes de venta minorista, pero dadas las condiciones se espera un aumento de inventario más lento y progresivo lo que contribuye al ajuste y la disminución de la vacancia.